La estabilidad a mediano y largo plazo, el bajo
riesgo y valoración constante que caracterizan
a los proyectos de loteamiento lo convierten
en una producto idóneo a la hora de elegir
un activo en el cual invertir.
Aumentan de valor a medida que pasa el tiempo. A diferencia de otros activos que pierden su valor a lo largo del tiempo.
El precio unitario por metro cuadrado de un lote es mayor al precio por metro cuadrado de una hectárea.
Esta protegido del riesgo de robo y fenómenos atmosféricos, al contrario de emprendimientos agro-ganaderos y compra-venta de vehículos, tecnología entre muchos otros.
Los costos del loteamiento se pagan solo. Los mismo son solventados por Grupisa, la cual realiza los desembolsos y los descuentan de los ingresos que produce el loteamiento, sin cobrar ningún tipo de interés.
Generan ingresos pasivos, es decir, ingresos monetarios sin gastar el tiempo ni el capital de los propietarios, similar a los alquileres, sin los costos de mantenimiento y el riesgo de la destrucción del inmueble, como ocurre con las casas y departamentos.
Permiten otros negocios vinculados como ser aguaterías, construcción de viviendas económicas, alambrado perimetral de los lotes, por mencionar algunos.
Aun así, invertir en loteamientos requiere pasar por diversas etapas de análisis y evaluación además de contar con conocimientos, experiencia e infraestructura para la fijación de precios, ventas y cobranzas. Asi mismo es fundamental contar con un equipo de profesionales en el área impositiva, contable y jurídica.
Basándonos en estas expectativas lo invitamos a sumarse al grupo de inversores que confía en nuestros servicios.
